Quizá sea mejor que te deje de querer en primavera.
Podaré mis geranios, pero quien se atreve a quitarse las ramas y a pasar todo un largo invierno con la cabeza totalmente vacía y helada. Mis reservas no llegan para tanto.
Creo que te voy a querer un invierno más, después ya veré lo que hago. Esta tibieza es mejor que darme a la repostería y a la puta limpieza.
Que va a ser de mí sin poder recurrir a tu imagen, a la caída de tus ojos a tu coquetería. Aunque luego no pueda dormir. Pero no me importa mi insomnio a plazo fijo, estoy cansada de dormir tan bien.
Mi cariñito por ti, es lo más real y lo único sugerente que hay en mi vida de fantasma, de fantasma en pena.
Acostumbrada a mi soledad llena de monólogos, ya no hago preguntas, no me interesan las respuestas. Por eso podré quererte otro invierno más, si dios quiere.
Yo te inventé. Yo te quiero y no te quiero. Yo te hablo y te escucho. Yo te visto y te desnudo…Y hoy, voy a llevarte al cine... ¡Qué más puedo pedir!
A veces la vida se vuelve “rara” por un día, por mil días. Por eso yo busco tu calor, el calor que de ningún modo me darás.
Podaré mis geranios, pero quien se atreve a quitarse las ramas y a pasar todo un largo invierno con la cabeza totalmente vacía y helada. Mis reservas no llegan para tanto.
Creo que te voy a querer un invierno más, después ya veré lo que hago. Esta tibieza es mejor que darme a la repostería y a la puta limpieza.
Que va a ser de mí sin poder recurrir a tu imagen, a la caída de tus ojos a tu coquetería. Aunque luego no pueda dormir. Pero no me importa mi insomnio a plazo fijo, estoy cansada de dormir tan bien.
Mi cariñito por ti, es lo más real y lo único sugerente que hay en mi vida de fantasma, de fantasma en pena.
Acostumbrada a mi soledad llena de monólogos, ya no hago preguntas, no me interesan las respuestas. Por eso podré quererte otro invierno más, si dios quiere.
Yo te inventé. Yo te quiero y no te quiero. Yo te hablo y te escucho. Yo te visto y te desnudo…Y hoy, voy a llevarte al cine... ¡Qué más puedo pedir!
A veces la vida se vuelve “rara” por un día, por mil días. Por eso yo busco tu calor, el calor que de ningún modo me darás.
Y que, aunque sea un delito, yo quiero raptarlo.
CGC
No hay comentarios:
Publicar un comentario