martes, 18 de agosto de 2009

¡Ven aquí, ven, oh viento del Nayd... Ibn Al Hakim


¡Ven aquí, ven, oh viento del Nayd
y lleva contigo mi pasión y mi amor!
Cuando esparzas entre ellos mis noticias,
les llegará mi saludo con la fuerza de mi amor.
No les he olvidado. ¿Acaso lo han hecho ellos
debido a mi larga ausencia?
Mis ansias no son debidas a la belleza
ni a los habitantes de Nayd.
¡Oh viento! Cuando llegues a un lugar
cuya tierra se llena de ajenjo y laurel
da vueltas sobre él y hazles llegar,
de mi parte, albricias.
Diles que he llegado por su amor a un tal estado
que amo todo laurel y espino

Ibn Al Hakim