POEMA
Sentí real el pálpito
de tu oscura impresencia.
Supe que estabas.
Te busqué.
Ardía lento el fuego en los rincones
más secretos del ciego laberinto.
No busqué la salida, la imposible
salida.
Te buscaba.
Manifiéstate,
dije, sintiendo repentino
que ya lo habías hecho en el latido
de lo no manifiesto.
(el dios) 1° de mayo de 1997
José Ángel Valente
Sentí real el pálpito
de tu oscura impresencia.
Supe que estabas.
Te busqué.
Ardía lento el fuego en los rincones
más secretos del ciego laberinto.
No busqué la salida, la imposible
salida.
Te buscaba.
Manifiéstate,
dije, sintiendo repentino
que ya lo habías hecho en el latido
de lo no manifiesto.
(el dios) 1° de mayo de 1997
José Ángel Valente