jueves, 31 de julio de 2008

Momentos idóneos


Me levanté temprano, hacia las 7,30. Fui directamente al ordenador para encenderlo y conectar eMule, para que bajaran las películas que tengo seleccionadas. Por la noche me dio miedo dejarlo encendido, tengo tanto cable raro por ahí, que temo un accidente...

Fui a la cocina y puse la cafetera, mientras se hacía el café miré el correo.
Me serví la primera taza de café con leche y el primer cigarrillo del día. Momento grato donde los halla. Escuché música y me di una ducha rápida y templada.
Fui a hacer mi cama, la hice dos veces sin poner la sábana de arriba, dije, pues vale, las voy a cambiar: están protestando. Puse la lavadora.

Me puse unos pantalones tipo chino de color beige y una blusa azul marino con escote en forma de U, me pinté los labios con el primer carmín que pillé. Até a Canela y me fui al centro de salud a por las recetas de mi madre y mías, no había colas. Crucé a la farmacia, tenían de todo y no había colas (que día tan raro)

Volví a casa y dejé a Canela, no me gusta dejarla atada mientras hago la compra, ladra mucho y temo por su integridad, si da con otra perra más brava que ella, cosa difícil. Vuelvo a bajar, compro pan y como me he levantado antes de lo habitual, tengo hambre, me salto las normas y me compro un Bollín Preñao (un panecillo pequeño con un trocito de chorizo asturiano dentro) desde luego me pierde la gula. Me lo como en dos o tres mordiscos.

Saqué el número para la pescadería y compré, mientras, la fruta: unas peras, plátanos y una piña. Volví a la pescadería y compré parrochina, (sardina pequeña) que estaba como la plata.

En la carnicería sólo había dos mujeres. Compré tres carrilleras de cerdo y un pollo tomatero.

Después queso de cabra fresco y una botella de vino de La Ribera del Duero.

Volví a casa, recogí la compra, cada cosa en su sitio; tendí la ropa de la lavadora y me serví una copita de vino.

Al tercer o cuarto sorbo, me dio un mareillo, muy poco agradable, será la falta de costumbre. Ahora, que el vino es estupendo.

Momentos idóneos, en los que yo, me dejo fluir. Y me alegro.

CGC

Jueves, 31 de julio de 2008. Gijón

miércoles, 30 de julio de 2008

Jorge Luis Borges. Ausencia


AUSENCIA

Habré de levantar la vasta vida
que aún ahora es tu espejo:
cada mañana habré de reconstruirla.
Desde que te alejaste,
cuántos lugares se han tornado vanos
y sin sentido, iguales
a luces en el día.
Tardes que fueron nichos de tu imagen,
músicas en que siempre me aguardabas;
palabras de aquel tiempo,
yo tendré que quebrarlas con mis manos.
¿En qué hondonada esconderé mi alma
para que no vea tu ausencia
que como un sol terrible, sin ocaso,
brilla definitiva y despiadada?
Tu ausencia me rodea
como la cuerda a la garganta,
el mar al que se hunde.

Jorge Luis Borges

martes, 29 de julio de 2008

Y tu recurdo es dulce


No me duele nada
Y tu recuerdo es dulce.

Como las lilas
Y las higueras en verano.

Amo tu sombra
Como amé tu luz.

Estás tan presente
Como cuando estabas.

No me duele nada
Y tu recuerdo es dulce.

Como el olor de tu cuerpo
Y mi perfume cacharel.

Eres esclavo de mi mente,
Y no tendrás libertad.

No quiero que vuelvas
A cambiar ni una escena.

Y tu recuerdo es dulce...
CGC


Alcalá de Henares 1992
A Andrés

lunes, 28 de julio de 2008

Gibran khalil Gibran. Derrota


DERROTA

Derrota, mi derrota, mi soledad y mi aislamiento: Para mí eres más valiosa que mil triunfos,
Y más dulce para mi corazón que toda la gloria mundanal.
Derrota, mi derrota, mi conocimiento de mi mismo y mi desafío.
Tú me has enseñado que soy joven aún y de pies ligeros y a no dejarme engañar por laureles vanos.
Y en ti he encontrado la dicha de estar solo Y la alegría de ser alejado y despreciado.
Derrota, mi derrota, mi fulgurante espada y mi escudo:
En tus ojos he leído que ser entronizado es ser esclavizado, y que ser comprendido es ser derribado. Y que ser apresado es llegar a la propia madurez Y como un fruto maduro, caer y ser objeto de consumo.
Derrota, mi derrota, mi audaz compañera:
Oirás mis cantos, mis gritos y silencios, y nadie mas que tú me hablará del batir de las alas. De la impetuosidad de los mares. Y de montañas que arden en la noche.
Y sólo tú escalarás mi inclinada y rocosa alma. Derrota, mi derrota, mi valor indómito inmortal. Tú y yo reiremos juntos con la tormenta.
Y juntos cavaremos tumbas para todo lo que muere en nosotros. Y hemos de erguirnos al sol, como una sola voluntad. Y seremos peligrosos.
Gibran khalil Gibran




sábado, 26 de julio de 2008

Sola


Estoy ciega
Sorda y muda.

Entre pesadillas
Agoto mi vida.

No afirmo nada,
No concibo nada,
No hago nada.

Mis sueños
Se rompen
Cada crepúsculo.

El sol no me toca,
Ni la lluvia,
Ni tú. Ni nada.

No hay casa
Ni silla ni mesa,
Para mis desatinos.

Busco la luz de un rayo
Sola en la tormenta.

CGC

Julio de 2008

viernes, 25 de julio de 2008

Palabras



Sin palabras



A veces, cuando te marchas,
el aire te sigue.

Después el vacío: la palabra
se queda sin sustento.

Es entonces cuando
todo mi silencio te convoca.



Luzamarga.

Blog "Donde habita el olvido"


http://cristalenlasvenas.blogspot.com/2008/07/sin-palabras.html

miércoles, 23 de julio de 2008

Omar Khayyan

Foto Nisu
El mundo es un grano de polvo en el espacio;

la ciencia de los hombres, palabras;

los pueblos, los ríos y las flores de los siete climas

son sombras de la nada.

Omar Khayyam

lunes, 21 de julio de 2008

Alejandra Pizarnik. Mendiga voz


MENDIGA VOZ

Y aún me atrevo a amar
el sonido de la luz en una hora muerta,
el color del tiempo en un muro abandonado.

En mi mirada lo he perdido todo.
Es tan lejos pedir. Tan cerca saber que no hay.



Alejandra Pizarnik






sábado, 19 de julio de 2008

Miguel Hernández. Umbrío por la pena, casi bruno




Umbrío por la pena, casi bruno,
porque la pena tizna cuando estalla,
donde yo no me hallo no se halla
hombre más apenado que ninguno.

Sobre la pena duermo solo y uno,
pena es mi paz y pena mi batalla,
perro que ni me deja ni se calla,
siempre a su dueño fiel, pero importuno.

Cardos y penas llevo por corona,
cardos y penas siembran sus leopardos
y no me dejan bueno hueso alguno.

No podrá con la pena mi persona
rodeada de penas y cardos:
¡cuánto penar para morirse uno!


Miguel Hernández

viernes, 18 de julio de 2008

Vencidos. León Felipe


VENCIDOS

Por la manchega llanura
se vuelve a ver la figura
de Don Quijote pasar...

Y ahora ociosa y abollada
va en el rucio la armadura,
y va ocioso el caballero,
sin peto y sin espaldar...
va cargado de amargura...
que allá encontró sepultura
su amoroso batallar...
va cargado de amargura...
que allá «quedó su ventura»
en la playa de Barcino, frente al mar...

Por la manchega llanura
se vuelve a ver la figura
de Don Quijote pasar...
va cargado de amargura...
va, vencido, el caballero
de retorno a su lugar.

Cuántas veces, Don Quijote,
por esa misma llanura
en horas de desaliento
así te miro pasar...
y cuántas veces te grito:
Hazme un sitio en tu montura
y llévame a tu lugar;
hazme un sitio en tu montura
caballero derrotado,
hazme un sitio en tu montura
que yo también voy cargado
de amargura
y no puedo batallar.
Ponme a la grupa contigo,
caballero del honor,
ponme a la grupa contigo
y llévame
a ser contigo pastor.

Por la manchega llanura
se vuelve a ver la figura
de Don Quijote pasar...
León Felipe
Dedicado a mi amigo Rafa Gómez que, a pesar de toda una vida, aún no somos "cosas" besitos guapo.

jueves, 10 de julio de 2008

José Ángel Huesa. Poema del Amor Pequeño




Poema del Amor Pequeño

Fue breve aquella noche. Fue breve, pero bella.
Poca cosa es el tiempo, que es también poca cosa,
porque nadie ha sabido lo que dura una estrella
aunque todos sepamos lo que dura una cosa.

Nuestro amor de una noche fue un gran amor pequeño
que rodó por la sombra como un dado sin suerte,
pero nadie ha sabido lo que dura un ensueño
aunque todos sepamos lo que dura la muerte.

Una noche es eterna para el que no la olvida,
y el tiempo nada importa para el sueño y la flor,
y, como nadie sabe lo que dura la vida,
nadie sabe tampoco lo que dura el amor.



José Angel Buesa

martes, 8 de julio de 2008

Luis Alberto de Cuenca. Cómo te defiendes de mí



Cómo te defiendes de mí

Cómo te defiendes de mí.
Cómo resistes,
desde la torre de la ausencia,
agitando el pañuelo para siempre,
sin forma ni color,
humo tan sólo,
aérea y rígida en tu nube,
diciendo adiós al mundo y a mis brazos,
muerta y levísima.
Cómo te defiendes de mí.
Cómo, al fin, me derrotas
y me sepultas, también a mí,
en la tumba sin flores del olvido,
donde mis huesos no conozcan
la senda de tu cobardía.
Luis Alberto de Cuenca

sábado, 5 de julio de 2008

Hay muchos mares


Cuando no hay nada que hacer, lo mejor es rendirse. Yo soy necia y tozuda, pero hasta para mí, ha llegado el momento de la rendición.

Me aparto de mis armas (todas inofensivas) y me alejo. Algún día tenía que ser. Es mucho lo que pierdo con esta derrota: el calor de tu cuerpo dentro de mi cabeza, que me hace sentir viva, y todas las palabras que han salido de mi teclado y han alegrado tantas horas de mi vida.

Reconozco que me he pasado sobre todo por el tiempo, por tanto tiempo en contacto con el vacío de un agujero negro.

Pero estoy bien, hay muchos mares, mucha arena, mucho sol, mucha luz y la vida siempre es un misterio, que puede reservarme algo de amor donde menos lo piense.

Tengo muchas artes para olvidar. Y el tiempo no me importa nada, el tiempo y yo nos hemos fundido, en un absoluto que va sin prisa, hacia donde tenga que ir...

Sin prisa pero sin obsesión. En todo caso sin esta obsesión.

Abriré mis puertas y mis ventanas y estos afectos míos, que no han recibido ni una gota de clemencia, volverán, donde siempre debieron estar: en el fondo del mar.

Cómo las llaves de la canción.

CGC

viernes, 4 de julio de 2008

Malena Cirasa. Paraje ciego



PARAJE CIEGO

De espaldas a la lluvia
tus años
tu inocencia
como un fuego perdido que parte en dos
transforman
lo que de mí no entiendo.
Mi lengua busca tu cicatriz.
Arrojo níqueles
raíces rotas por un golpe artero
y a cambio
me devuelves esta luz.
Para quedarte
has buscado un lugar
en la tormenta.

Malena Cirasa